Descubriendo la ciencia desde cinco laboratorios del Centro de Tecnología Biomédica

El CTB invita a estudiantes de 6 a 18 años a compartir experimentos con sus investigadores: analizar una lágrima, extraer ADN o comprobar los efectos del alcohol en los jóvenes son algunas de estas experiencias.

 

10.02.16

La colaboración entre ingenieros e investigadores clínicos ha transformado la práctica de la medicina. Los avances en informática biomédica, ingeniería química, ciencia de los materiales o en el desarrollo de sofisticados sistemas robóticos han hecho posible nuevos tratamientos para las enfermedades, mayor precisión en su diagnóstico y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

 

CTBdentroPero,  ¿cómo y dónde trabajan estos equipos científicos multidisciplinares?, ¿conocen y valoran los más jóvenes la importancia del trabajo de los expertos?, ¿son conscientes de la decisiva influencia del avance de la tecnología médica en nuestras vidas? y, sobre todo, ¿se forman nuevas generaciones para que continúen su labor?

 

Con ese objetivo, fomentar  la creatividad y las vocaciones científicas, investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), dirigidos y coordinados por Francisco del Pozo y Mª Jesús Pioz, han puesto en marcha el proyecto “Descubriendo la Ciencia desde cinco Laboratorios del Centro de Tecnología Biomédica”.

 

El CTB con esta experiencia trata de acercar la ciencia a escolares de entre 6 y 18 años que, a través de talleres prácticos trimestrales, desarrollarán con los investigadores prácticas específicas relacionadas con la actividad de cinco laboratorios implicados en el proyecto. 

 

De los dieciocho laboratorios del CTB participan en este proyecto el Laboratorio de Neurociencia Cognitiva y Computacional, cuyo Investigador Principal es  Fernando Maestú; el Laboratorio de Biología Molecular y Bioquímica, con Milagros Ramos como IP; el Laboratorio de Bioinstrumentación y Nanomedicina, cuyo es José Javier Serrano; el Laboratorio de Redes Biológicas, Irene Sendiña y Javier Martín Buldú como Investigadores Principales, y el Laboratorio de Biofotónica, cuyo IP es Miguel Holgado.  

 

En todos ellos colaboran investigadores de distintas especialidades para qué los jóvenes conozcan diferentes áreas de investigación y las profesiones científicas relacionadas con ellas.  Participarán  en prácticas tan diversas como:



• Estudio científico de los efectos del Consumo Intensivo de Alcohol en Jóvenes (Binge Drinking), y los daños que provoca en la actividad cerebral.
• Análisis y diagnóstico a través de una lágrima.
• Reacción de Belousov-Zhabotinsky (BZ), una simplificación que permite estudiar  los relojes o  ritmos  biológicos.
• Reacción química oscilante de BZ.
• Extracción de ADN.
• Observación de células  animales al microscopio.



En el proyecto, que se prolongará a lo largo de 2016, participarán inicialmente cuatro centros educativos (colegios e institutos) de la Comunidad de Madrid, estando cofinanciado por el FECYT.