El profesor Michael Ortiz, nuevo doctor honoris causa por la UPM

Referente en mecánica teórica y computacional de sólidos, el profesor de Caltech ha recibido la máxima distinción académica de la UPM en una ceremonia presidida por su rector, Guillermo Cisneros, acompañado por José Manuel Torralba, director general de Universidades y Enseñanzas Artísticas Superiores de la Comunidad de Madrid.

05.07.19

Michael Ortiz, profesor del Instituto Tecnológico de California (Caltech), ha sido nombrado doctor honoris causa por la Universidad Politécnica de Madrid (UPM). Reconocido como uno de los referentes en mecánica teórica y computacional de sólidos, el profesor Ortiz ha desarrollado nuevos modelos y métodos de cálculo aplicados, entre otros, a materiales utilizados en ingeniería civil, mecánica y aeroespacial. Las aplicaciones de sus trabajos son, además,  multidisciplinares: impactos entre sólidos a gran velocidad, encapsulamiento de ADN, tratamiento de tumores mediante ondas mecánicas, nuevos hormigones, etc.

El rector de la Universidad Politécnica de Madrid, Guillermo Cisneros, ha destacado que el currículum y la trayectoria vital del profesor Ortiz es “ejemplo de lo que el verdadero Maestro – maestro con mayúsculas – universitario debería conseguir o, por lo menos, mantener como meta para su trabajo diario”.

Firme defensor del sistema universitario europeo

Titulado en Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos por la UPM, Michael Ortiz ha desarrollado su carrera investigadora en EE.UU., en las universidades de California (Berkeley), donde obtuvo su doctorado, de Brown y el Instituto Tecnológico de California (Caltech). En su discurso, el nuevo doctor ha reflexionado sobre los “enormes contrastes” que, desde su experiencia, existen entre los sistemas educativos y de investigación europeos y el norteamericano.  

En su opinión, en los niveles de grado y máster se aprecian diferencias entre las “tradiciones de gran ingeniero enciclopédico al estilo francés, por un lado, y el ingeniero utilitario al estilo anglosajón, por otro”. La formación europea del ingeniero abarca múltiples disciplinas relacionadas con las matemáticas, la mecánica, la física o la química, completándose además con cursos de otras áreas de conocimiento, lo que da lugar al ingeniero concebido como “profesional de élite”. Por otro lado, el modelo anglosajón está orientado a ofrecer a los técnicos una formación básica que permita un “posterior aprendizaje ya en sus puestos de trabajo”.

“Puestos a elegir entre ambos modelos de carrera universitaria, me quedo siempre y sin lugar a dudas con mi querida Escuela de Caminos, Canales y Puertos”, subrayó el nuevo doctor, ya que en comparación con el plan de estudios que cursó en la UPM, “absolutamente espectacular”, los planes de grado norteamericanos homólogos son “enormemente inferiores en contenido, profundidad y alcance”.
No obstante, el profesor Ortiz indicó que esta situación se revierte en los programas de investigación científica, en los que EE.UU. no tiene “parangón ninguno a nivel mundial”. A su modo de ver, la “diferencia fundamental entre los dos sistemas estriba en que la investigación en EE.UU. responde fundamentalmente a estímulos competitivos y presiones de libre mercado”, de modo que el sector está orientado de “forma clara y decidida hacia la innovación y la superioridad tecnológica”, concluyó.

En este sentido, el rector de la UPM ha afirmado que España tiene un “sistema universitario robusto”. “El sistema universitario público español ha conseguido, en términos de equidad de acceso, cambiar la sociedad española. Pero aun así echamos de menos tener alguna universidad posicionada en el top 20 del mundo”. Sin embargo, prosiguió Guillermo Cisneros, si analizamos los rankings por áreas de actividad, “nos encontramos fuertemente posicionados”. Una condición para seguir mejorando en los rankings es que la Universidad no se vea como un gasto, sino como una “inversión como región o país”. “La investigación necesita financiación pública y también privada”, subrayó.

Sobre Michael Ortiz

Titulado en Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos por la UPM (1977), obtuvo su doctorado financiado con una beca Fulbright en el departamento de Ingeniería Civil y Medioambiental de la Universidad de California (Berkeley), bajo la dirección de Egor Popov. Ese departamento fue, durante los años 70 y 80, el “epicentro de la mecánica computacional, es decir, el uso de ordenadores y métodos numéricos para resolver problemas de mecánica de sólidos, fluidos y estructuras”, indicó en la laudatio Ignacio Romero, profesor de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de la Universidad Politécnica de Madrid y padrino del nuevo doctor.

Su primera plaza como profesor la obtuvo, pocos años después, en la Universidad de Brown. Esta universidad reunía en esos momentos, posiblemente la mayor concentración de expertos en mecánica de sólidos del mundo. Allí coincidieron, entre otros, investigadores de la talla de Alan Needleman, Robert Asaro, Richard James y Subra Suresh. El profesor Ortiz se incorpora en 1995 al Departamento de Ingeniería Aeroespacial del Instituto Tecnológico de California (Caltech), donde trabaja actualmente.

Con cerca de 350 artículos publicados, el profesor Ortiz ha recibido algunos de los premios más importantes en sus campos de investigación. Por citar los más señalados, dentro de la ingeniería y mecánica de sólidos, ha recibido la medalla Timoshenko de la Sociedad Americana de Ingenieros Mecánicos (ASME) y el premio Rodney Hill de la Unión Internacional de Mecánica Teórica y Aplicada (IUTAM). En el ámbito de la mecánica computacional ha sido galardonado con el premio de investigación de la Asociación Internacional de Mecánica Computacional (IACM), el premio Zienkiewicz de la Sociedad Española de Métodos Numéricos en Ingeniería (SEMNI) y recibirá, este mismo mes, la medalla von Neumann de la Asociación Americana de Mecánica Computacional (USACM). Además, es miembro de las Academias Americanas de Ingeniería y de Artes y Ciencias, y miembro correspondiente de la Academia Española de Ingeniería.