#HidroCer, la piel del edificio que refrigera el exterior reduciendo el uso del aire acondicionado

La cerámica hidroeficiente #HidroCer, termorregula la envolvente del edificio mediante enfriamiento por evaporación. Se han estimado reducciones de más del 90% de la demanda de refrigeración actual en los edificios (en ciertas regiones de clima mediterráneo).

23.07.2018

Reducir el uso de climatizadores externos (tales como radiadores o aires acondicionados) es uno de los retos de los nuevos edificios de cara a mejorar su eficiencia y convertirse en estructuras más sostenibles. Ese es el objetivo de la cerámica eficiente HidroCer, capaz de termorregular la envolvente del edificio mediante evaporación. Una tecnología que se implantará de manera piloto en el mercado en el marco de un proyecto en el que participan investigadores de la UPM.

El grupo de investigación Arquitectura Bioclimática en un entorno sostenible (ABIO-UPM) y el Instituto Tecnológico Cerámico de Castellón (ITC) forman el consorcio encargado de llevar la tecnología de laboratorio #HidroCer a un producto de mercado. A través de la financiación obtenida por el EIT-Climate KIC para un proyecto Pathfinder, se analizará su implantación en el mercado.

“Con la reciente publicación de Directiva de Eficiencia Energética UE 2018/844 del 30 de mayo, las emisiones se limitan aún más y se promueve la renovación del parque inmobiliario construido como estrategia clave en esta reducción”, explica Javier Neila, catedrático de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la UPM.

“Por otro lado, los edificios de nueva planta tienen que ser ya Edificios de Consumo Casi Nulo (nZEB). Por tanto, se prevé una creciente demanda de mercado de sistemas que permitan alcanzar la temperatura de confort interior del edificio sin empleo de equipos de climatización”, añade. Es en este ámbito en el que  #HidroCer aspira a posicionarse en un momento clave para el sector de la construcción, que está cambiando su modelo de construir.

El sistema de cerámica hidroeficiente de #HidroCer es fácilmente integrable en los sistemas de fachada ventilada actuales, tanto para obra nueva como para rehabilitación. Este material transpira, evapora y consigue mantener su temperatura superficial muy por debajo de las altas temperaturas exteriores de verano con muy poco consumo de agua, sin ningún otro aporte externo de energía y en tan solo 2,5 cm de espesor.

“Reduciendo la temperatura de la envolvente de los edificios y las emisiones a la atmósfera, se mitiga el efecto isla de calor urbana y se mejora la calidad del aire que se respira en las ciudades. De hecho, en algunas regiones de clima mediterráneo se han observado reducciones de más del 90% de la demanda de refrigeración en los edificios” explica el investigador de la UPM.

Hasta el momento,  las experimentaciones se han realizado a nivel de material cerámico. Se han realizado en laboratorios de Madrid, de la UPM, y de Castellón, en el ITC. El primer prototipo se realizará también en Castellón a partir de 2019.