Investigadores de la UPM han analizado el potencial de las aguas residuales como fuente de energía térmica para climatizar los edificios y han demostrado que resulta más eficiente que los sistemas geotérmicos tanto para calentar como para refrigerar las instalaciones.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid proponen el uso de disolventes renovables para obtener antioxidantes de residuos de uva en el marco de la bioeconomía circular.