Un DCblock es un contenedor marítimo que contiene tanques de inmersión especialmente diseñados para una aplicación determinada.  Dichos tanques alojan un gran número de equipos de cómputo, sin cajas metálicas, disipadores o ventiladores, para aumentar la densidad, dentro de un líquido dieléctrico. Este refrigerante se evapora cuando los procesadores se calientan, absorbiendo gran cantidad de calor, que además se va de forma pasiva hasta que vuelve a condensar en la parte superior del tanque.

Nuestros algoritmos predictivos nos permiten trabajar cerca de los límites de funcionamiento del fluido, aumentando la densidad máxima muy por encima de cualquier otra solución del mercado.  Y la solución integrada facilita el despliegue en cualquier entorno.

“La refrigeración por inmersión con dos fases permite multiplicar por 20 la máxima densidad de cómputo disponible en el mercado, y sin un gasto de energía significativo.”

Minado de criptomonedas, infraestructura para cloud computing, infraestructura para big data

Nichos del mercado de centros de datos con escasa diferenciación y en guerra de precios. Necesitan innovar, por lo que son los primeros que adoptarían la tecnología. En todos estos mercados, el coste energético representa miles de millones al año y nuestra solución puede reducir hasta un 50% ese consumo.

Mejora de eficiencia energética en centros de datos

En Europa tienen caídas frecuentes por saturación de la infraestructura de distribución eléctrica y la densidad de potencia sigue aumentando.

TIC aplicado a sistemas inteligentes de transporte

Las necesidades de procesamiento de información para sistemas de asistencia a la conducción o vehículo autónomo son enormes. Las soluciones actuales para edge computing tienen un coste muy alto y no son aplicables a climas cálidos.

TIC aplicado a salud (5G es similar)

La medicina personalizada puede suponer ahorros significativos a los sistemas públicos de salud y una importante mejora en la calidad de vida, especialmente de enfermos crónicos y ancianos. Sin embargo, su aplicación a nivel poblacional es complicada porque requiere edge computing (demasiados datos para mandarlos a cloud) y las soluciones actuales son caras o no aplicables a cualquier clima.

“Las ciudades inteligentes y la Internet de las Cosas van a demandar el procesamiento de ingentes cantidades de datos en tiempo real, lo que requiere el despliegue de pequeños y potentes centros de datos cerca de las fuentes”

Las ventajas más importantes son:

1) la capacidad de controlar el arranque del tanque de inmersión actuando sobre el reparto de recursos para evitar que la temperatura alcance valores críticos; y

2) la capacidad de controlar la temperatura máxima mediante el reparto de carga de trabajo y los ajustes del circuito de refrigeración secundario, con el fin de no alcanzar el flujo crítico, que haría que la temperatura aumentase súbitamente hasta niveles muy peligrosos.

Este control es posible gracias a las técnicas de modelado predictivo y simplificación de los modelos obtenidos.