SONRÍE es un sistema de apoyo terapéutico Kinect para niños con parálisis cerebral infantil.  

Utilizando un sensor Kinect 360 se han creado una serie de juegos para detectar distintos gestos faciales -soplido, subida de cejas, beso y sonrisa- de forma que se logre, en primer lugar, una mayor precisión en la detección y, posteriormente, una mejora terapéutica en los movimientos del rostro y en la expresión facial.

Es esencial que se realicen estos ejercicios de rehabilitación facial ya que permitirán mejorar la correcta ejecución de los movimientos del rostro. Además la repetición de estos ejercicios permite que se produzcan aprendizajes y nuevos esquemas cerebrales de movimiento. 

“SONRÍE se crea para ayudar a rehabilitadores, fisioterapeutas y logopedas a detectar y a rehabilitar los trastornos faciales de los niños con alteraciones neurológicas” 

Salud

• La parálisis cerebral es una afección encefálica que se caracteriza por un trastorno persistente, pero no invariable, del tono, la postura y el movimiento.

• Las diferentes afectaciones que sufren los niños con parálisis cerebral hacen difícil, o en ocasiones imposible, la realización de múltiples actividades cotidianas como vestirse, asearse, comer, ir al colegio o incluso caminar o hablar.

• Con el objetivo de que estos niños puedan hablar, gesticular e incluso alimentarse correctamente es crítico que realicen ejercicios de rehabilitación facial.

Salud

• La incidencia de la parálisis cerebral es actualmente de 2 a 3 por cada 1.000 nacimientos . Sin embargo , este número va en aumento debido a un aumento en los casos nuevos y el aumento de la esperanza de vida de los afectados.

• Esta tasa sube a un rango entre 40 – 100 de cada 1.000 nacimientos, entre los bebés nacidos muy prematuros o con muy bajo peso al nacer.

•  Se observan tasas similares tanto en el mundo en desarrollo como desarrollado.

•  La tasa de incidencia es mayor en hombres que en mujeres; en Europa por ejemplo es 1,3 veces más frecuente en varones

•  SONRÍE estimula cuatro gestos faciales: subida de ambas cejas, soplido, beso y sonrisa.

•  Los juegos pretenden explorar primero y trabajar después los músculos encargados de cada uno de los gestos, de forma que se logre una mejora terapéutica en los movimientos faciales realizados.

•  Su repetición hace que se produzcan nuevos aprendizajes y nuevos esquemas cerebrales de movimiento.

•  El niño es parte activa del proceso, lo que contribuye a mejorar su autoestima y su satisfacción personal.

•  Adaptable a otras patologías que afectan al tono y control muscular, como síndrome de Down, síndrome de Moebius, o distrofias, entre otros.

•  Extrapolable a adultos con parálisis faciales, esclerosis lateral amiotrófica, traumatismos craneoencefálicos o accidente cerebro vascular con afectación facial.  

 “La medicina y los tratamientos de rehabilitación están utilizando cada vez más las nuevas tecnologías ya que permiten construir soluciones más atractivas para los pacientes que van a beneficiarse de ellas”

Pantallas de interacción con diferentes juegos para motivar a los niños