Universidad
Politécnica de Madrid

24.06.2015

El Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano de la Universidad Politécnica de Madrid (itdUPM)  se creó en 2012. Desde el mismo  se centraliza la actividad en cooperación para el desarrollo de la UPM, una de las universidades más activas en este ámbito. Lee la entrevista con su director Carlos Mataix.

En el marco de  la conferencia Tecnología e Innovación para el Desarrollo que reunirá a expertos nacionales e internacionales en materia de cooperación, el director del itdUPM, Carlos Mataix analiza el papel de este centro y los retos y aportaciones de la tecnología al desarrollo de la sociedad. 

P: ¿Cómo surge la idea de crear el Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano de la Universidad Politécnica de Madrid?

R: El Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano de la UPM (itdUPM) es  hoy una realidad gracias al trabajo realizado durante casi 20 años por investigadores, profesores y alumnos de esta universidad que comenzaron a aplicar sus conocimientos a la Cooperación Internacional para el Desarrollo contribuyendo así a que esta tuviera un espacio propio en la Universidad.

La cooperación internacional ha evolucionado considerablemente y en la actualidad, converge con la necesidad de innovar para lograr soluciones y respuestas más sostenibles a los grandes problemas de la humanidad. Eso significa trabajar en campos que funcionan como intersección de los ámbitos de conocimiento tradicionales y buscar un conocimiento nuevo, para lo que es necesaria la colaboración de expertos que vengan de tradiciones distintas si bien complementarias.

En este contexto, el itdUPM pretende ser un espacio en el que se den la colaboración y las condiciones óptimas para generar los conocimientos necesarios para abordar estos retos y transferirlos a la sociedad.

P: La definición de la agenda post 2015 es uno de los grandes retos planteados en este momento en la cooperación internacional. ¿Por qué es tan importante que los ingenieros participen en este proceso? ¿Qué pueden aportar estos perfiles a la definición de esta nueva agenda?

R: No hay duda de que el modo actual de dar respuesta a las necesidades de la población es insostenible y de que tenemos que caminar todos hacia una transformación. Hay que   establecer una armonía entre una población creciente (dentro de no mucho tendremos que hablar de 9.000 millones de habitantes), más urbana y que cada vez tiene más necesidades y un mundo en el que asistimos a un agotamiento de los recursos esenciales y donde se pone en riesgo la vida en el planeta debido al excesivo agotamiento y deterioro de los recursos esenciales.

En este marco, en el que se hace necesario desarrollar respuestas y formas de comportamiento diferentes, las instituciones de educación superior y, más en concreto, las universidades politécnicas públicas, debemos jugar un papel fundamental.

"El modo actual de dar respuesta a las 
necesidades de la población es insostenible". 

P: Como director del ItdUPM, ¿cómo valora las actuaciones de esta universidad en cooperación internacional?

R: La UPM está reconocida como una de las universidades más comprometidas e innovadoras a la hora de organizar sus recursos y capacidades para dar respuesta a los grandes problemas que afectan a la población más vulnerable. En un mundo cada vez más interdependiente, no hay que olvidar que esos problemas son los problemas de todos.

Gracias al esfuerzo de los grupos de investigación repartidos en todas sus Escuelas y al compromiso de los equipos de gobierno de la universidad se ha creado el Centro de Innovación en Tecnología para el Desarrollo Humano que es único entre las universidades españolas y que está siendo capaz de enlazar de forma eficaz el gran caudal de talento de la Universidad con la demanda creciente de ideas y respuestas nuevas que surgen en el ámbito internacional.

P: ¿Cuáles son las principales fortalezas del itdUPM?

R: Su principal valor es que contamos con 20 años de experiencia en ámbitos como  el agua, la energía, las tecnologías de la información, el hábitat… Sobre esos temas  se ha ido creando una red de colaboración entre profesores e investigadores de la UPM que permite contar con un espacio único.

La otra cuestión que lo hace diferente es la vocación que tenemos en la UPM por lograr que aquello que enseñamos y diseñamos sea realmente útil. En este sentido el itdUPM está ofreciendo a empresas, organismos e instituciones internacionales servicios y de labores de apoyo que no encuentran en ningún otro lugar. Es muy significativa la creciente demanda que tenemos de nuestros servicios de investigación por parte de instituciones internacionales de primera línea. Nos consideran sus o aliados.

P: ¿Cómo valoras la postura de los más jóvenes respecto a la cooperación y a su posible trabajo en el itdUPM?

R: Los jóvenes están cada vez más implicados en la cooperación y a medida que pase el tiempo su papel será cada vez más activo y necesario. Tenemos que aprender mucho de nuestros estudiantes y de la mentalidad abierta y nueva con la que afrontan el futuro. Al itdUPM se acercan muchos estudiantes a los que tratamos de dar respuestas y lo que más nos satisface es que, por lo general, son personas con un excelente currículo académico que quieren que su actividad y su profesión en el futuro tenga sentido. Buscan aplicar lo que han aprendido en la UPM para hacer del mundo un lugar mejor.

"Los jóvenes están cada vez más implicados 
en la cooperación y su papel será cada vez 
más activo y necesario". 

P: ¿Hay alguna acción o investigación en marcha ahora mismo en el itdUPM que quieras destacar?

R: Se podrían destacar muchas, pero algo que me parece interesante porque aborda de un modo diferente a como se ha hecho hasta ahora la cooperación es que, gracias al itdUPM, la UPM se está convirtiendo en un elemento integrador de agencias internacionales de cooperación al desarrollo y  grandes empresas tecnológicas que quieren contribuir a mejorar las condiciones de vida en todo el mundo.

Así por ejemplo, el itdUPM es el gestor de una alianza entre el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, tres grandes empresas tecnológicas españolas y la Agencia Española de Cooperación. Esta alianza trabaja en el diseño de  nuevas soluciones tecnológicas y organizativas que den respuesta a las necesidades energéticas que tiene la población desplazada en campos de refugiados, especialmente en el Norte de Etiopía que es donde se están llevando a cabo varios estudios piloto.

En estos proyectos hay investigación y formación, lo que se espera tradicionalmente de la Universidad, pero también hay algo nuevo que es la concepción de la Universidad como un espacio nuevo, de encuentro entre instituciones comprometidas con la institución.

P: Y finalmente, ¿qué supone para ti a nivel personal ser director de un centro como este?

R: Es algo muy natural dentro de mi trayectoria en la universidad: fui estudiante, hice el doctorado,  fui profesor y ahora estoy contribuyendo, con otras muchas personas, a abrir un espacio nuevo en la UPM que resulta muy satisfactorio y que espero que tenga continuidad en el futuro. Confío en que este espacio nuevo de servicio e interacción con la sociedad pueda seguir evolucionando en el futuro y siga siendo referente.

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