Reconstrucción del arco de entrada del Monasterio Santa María de Rioseco

Mercedes González, profesora de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la UPM y coordinadora de este Proyecto de Innovación Educativa, explica en la siguiente entrevista cómo ha sido el desarrollo de este trabajo.

15.02.22                                                                                           Vídeo  

“Análisis de valores, criterios de intervención y reconstrucción del arco de entrada del Monasterio Santa María de Rioseco (Burgos)” es el título del Proyecto de Innovación Educativa que ha coordinado la profesora de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Madrid, Mercedes González.

El proyecto ha consistido en estudiar las condiciones patrimoniales del Monasterio Santa María de Rioseco (Burgos) y reconstruir un arco de piedra, que estaba desaparecido, en su entrada. El proceso ha comprendido el uso de técnicas de levantamiento fotogramétrico, de técnicas arqueológicas para el análisis del lugar, de técnicas de caracterización de materiales y localización de canteras, el análisis de los procesos de deterioro de materiales y elementos constructivos, el análisis mecánico de los elementos estructurales de la zona del edificio en la que se pretendía actuar y la evaluación previa de su estabilidad, el proyecto de reconstrucción, la traza necesaria, la talla manual de las piezas y el replanteo y montaje con economía de cimbras.

¿Cómo surgió la idea y cómo se ha desarrollado?

Conocimos el estado del monasterio gracias a la mediación de Miguel Sobrino, maestro del Taller de Cantería de nuestra Escuela, que había trabajado en la zona algunos años, y a raíz de este contacto habíamos hecho con anterioridad alguna visita con alumnos. Habiendo coincidido con los responsables del monasterio en la conveniencia de restaurar, entre otras cosas, la entrada al monasterio, llegamos al acuerdo de emplear los medios del Taller de Cantería y el Máster en Conservación y Restauración del Patrimonio para restituir el arco, del que quedaban huellas suficientes, de manera que a la vez los trabajos supusieran una experiencia real para los alumnos implicados.

Aunque el primer curso del Máster que emprendió este proyecto no pudo verlo culminado ese año, por la interrupción de la pandemia, aquellos alumnos pudieron también conocer y participar de la ejecución final. Siendo el objetivo una actuación real, el análisis del caso y la planificación de las acciones a realizar interesaban ya muy especialmente, pero, además, la talla manual de las piezas y la reproducción de los procedimientos tradicionales resultaron un enorme atractivo para los estudiantes. El día del montaje y descimbrado, culminando el trabajo de mucho tiempo, acudieron también muchos vecinos de la zona y alcaldes de los pueblos cercanos, convirtiéndose esta conclusión en una fiesta.

¿Qué resultados ha obtenido?

El resultado principal ha sido el propio arco construido, formado por las 23 dovelas talladas por los estudiantes. Otros resultados han sido:

• Por primera vez, en su formación como arquitectos/as, los estudiantes han realizado una actividad que unifica de forma directa la relación entre teoría y práctica constructiva real. Han tenido un encuentro inmediato con la realidad arquitectónica y sociocultural del conjunto, saliendo del “aula”.
• Se ha desarrollado la responsabilidad individual (cada estudiante con su dovela del arco) en el marco de la responsabilidad colectiva. Una correcta talla de cada piedra ha permitido una perfecta construcción del arco.
• Se ha conseguido la transversalidad entre las distintas áreas de conocimiento involucradas en el proyecto.
• La colaboración con el grupo local ha permitido el encuentro de distintos ámbitos, suponiendo un rico proceso de contraste y aprendizaje por ambas partes.

¿Cómo lo han valorado los estudiantes? y ¿el equipo docente?

Los estudiantes del Máster Universitario en Conservación y Restauración del Patrimonio Arquitectónico y los del Taller de Cantería del Grado en Fundamentos de la Arquitectura, lo han valorado muy positivamente, tanto los que lo empezaron en el curso 2019-20 y no pudieron realizarlo enteramente por la pandemia, como los que lo continuaron y terminaron en el curso 2020-21. De hecho, los estudiantes de este curso 2021-22 ya han solicitado que se organice una actividad similar para ellos.

El equipo docente también lo ha valorado muy positivamente, por lo que se ha decidido seguir interviniendo en el monasterio con un nuevo arco.

Arco


¿Cuáles son las principales dificultades a las que os habéis enfrentado?

La primera dificultad que tuvimos fue el confinamiento debido a la pandemia. La actividad, que estaba prevista de forma presencial en el monasterio para la última semana de marzo de 2020, se cambió por una práctica de reconstrucción virtual del arco.

El curso siguiente, se retomó la actividad, pero debido a las restricciones de movilidad entre las Comunidades Autónomas, fue necesario cambiar el lugar de la talla de la piedra, inicialmente prevista en el propio monasterio Santa María de Rioseco, y que, finalmente, se realizó en el taller de cantería de la ETSAM.

Además, el dinero del proyecto disponible inicialmente para material fungible no era suficiente para comprar la piedra necesaria para el arco.

¿Qué habría que mejorar? ¿Aspectos que se han cumplido?

Se han cumplido muy satisfactoriamente todos los objetivos propuestos.

¿Cómo se plantea la continuidad en el futuro?

Mediante un nuevo proyecto de Aprendizaje Servicio, recientemente concedido por la UPM, se va a continuar, utilizando la misma metodología, construyendo un nuevo arco de sillería en el mismo monasterio con los estudiantes del Máster Universitario en Conservación y Restauración del Patrimonio Arquitectónico y los del Taller de Cantería del Grado en Fundamentos de la Arquitectura del curso 2021-22. En este proyecto en el que van a participar, también, dos entidades: La Fundación Monasterio Santa María de Rioseco y el Ayuntamiento del Valle de Manzanedo (Burgos), se pretende colaborar de forma activa en la conservación de dicho monasterio.
Además, se van a presentar varias ponencias en las IV Jornadas del monasterio de Rioseco (Julio 2022) que organiza la Universidad de Burgos dentro de sus cursos de verano.