Universidad
Politécnica de Madrid

21.05.24

La Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación (ETSIT) de la UPM trasladó este año fuera de sus instalaciones la entrega de diplomas a los egresados. Por vez primera, titulados de grado y máster se reunían en una misma ceremonia, El lugar elegido para acoger a las distintas promociones del curso 2022-2023 y los invitados fue El Mirador de Cuatro Vientos, en el Real Aero Club de España. La fecha, 17 de mayo, coincidió con la celebración del Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información.

“Algunos estáis cursando un máster en la escuela o en alguna otra de nuestra universidad o fuera de ella. Otros ya estáis trabajando, o vais a poder trabajar donde vosotros elijáis”. A todos los egresados quiso el director de la ETSIT, Manuel Sierra, transmitir el mismo mensaje. “Recordad que allí donde estéis, vais a tener la capacidad de decidir cómo va a ser el mundo en los próximos años. Esta responsabilidad es muy grande, y me vais a permitir algún consejo. En vuestro trabajo del día a día, pensad en las implicaciones sociales, velad porque las tecnologías que vais a impulsar sean inclusivas, buscad siempre la sostenibilidad del planeta y, sobre todo, mostrad siempre una ejemplaridad ética en todas vuestras acciones y decisiones”.

Los números uno de las promociones del Grado en Ingeniería de Tecnologías y Servicios de Telecomunicación y el Grado en Ingeniería Biomédica, Ignacio Elvira y Candela Arrieta, respectivamente, recibieron las insignias de oro de la ETSIT como reconocimiento a su excelencia académica. También Álvaro Martín Cortinas, egresado del Máster Universitario en Ingeniería de Telecomunicación, poseedor del mejor expediente de entre todos los titulados de máster oficial.

La pandemia del coronavirus estuvo en el recuerdo de los graduados. “De repente, llegaron lo que iban a ser 15 días de vacaciones, pero se convirtieron en el mayor reto de nuestras vidas. La pizarra cambió por una pantalla, las voces por micrófonos y las dudas por mensajes”. evocó Elvira. Por fortuna, con “la normalidad”, volvió “la vida a la ETSIT”, añadió en referencia a las múltiples actividades de las asociaciones estudiantiles. “Es indudable la excelente formación académica que hemos recibido estos años, pero el ambiente inigualable [que se respira en la escuela] es el responsable del sentimiento de pertenencia y conexión con un lugar que, sin los clubes, se sentiría más vacío”.

Los docentes fueron los destinatarios de una parte del discurso que pronunció Arrieta.  “A lo largo de este viaje hemos podido coincidir con profesores que nos han inspirado, apoyado y guiado. Han sido referentes no solo en el ámbito académico, sino también en el personal, por lo que me gustaría expresarles nuestro más sincero agradecimiento. Su dedicación y compromiso con nuestra educación han sido fundamentales para nuestro progreso y formación académica y humana”.

El tercero de los egresados distinguidos puso el foco en la encrucijada que espera fuera del paraguas de la universidad.  “Estos años de formación nos han dado los medios para transitar prácticamente cualquier camino y ahora es nuestra responsabilidad elegir qué hacer con ello y qué mundo ayudamos a construir”, afirmó Martín. “Cada uno aportará a su manera, pero lo más importante es que al final del día miremos atrás y tengamos la satisfacción de saber que escogimos nuestro camino con reflexión, conscientes, y sin dejarnos llevar por la inercia o el miedo a equivocarnos”.

La ceremonia -que había empezado con la entrega del Premio ETSIT-UPM a los hospitales Infanta Leonor, Ramón y Cajal, La Paz y 12 de Octubre por su colaboración en la formación de los estudiantes de ingeniería biomédica- concluyó con las palabras del rector de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Guillermo Cisneros. Insistió a los egresados en que indiquen siempre dónde estudiaron cuando les pregunten por sus títulos académicos. “Las personas que pasen a vuestro lado, con solo ver la marca del equipaje, sabrán el contenido profundo que lleváis”, declaró en referencia al prestigio internacional de que goza la UPM. A la vez, el rector les pidió humildad en su ejercicio profesional. “Hoy en día no se concibe hacer ningún proyecto en solitario, se hace en equipo, pluridisciplinarmente, con personas de distinta formación que en cualquier momento os pueden enseñar algo”.