Universidad
Politécnica de Madrid

12.09.2022

Mercedes del Río es doctora arquitecta y su investigación se centra en el estudio y diseño de nuevos materiales con criterios de economía circular, sistemas constructivos y gestión de la edificación en la Escuela Técnica Superior de Edificación (ETSEM) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), donde es catedrática. Su motivación es desarrollar nuevos materiales más respetuosos con el medio ambiente a partir de materiales reciclados para mejorar la eficiencia energética de los edificios y el confort y la salud de los usuarios. Como resultado de su extensa trayectoria investigadora, Mercedes es coinventora de nueve patentes relacionadas con materiales de construcción y procedimientos para su obtención.

Pregunta.- Has desarrollado una larga carrera dentro de la UPM en múltiples facetas: investigadora, docente, gestora, inventora… ¿Qué parte de tu trabajo es la que más te motiva?

Respuesta.- La parte que más me motiva es la dirección de tesis doctorales pues a lo largo del desarrollo de las mismas puedes influir en el crecimiento personal y científico de los doctorandos y vas viendo cómo cambian sus esquemas mentales hacia la investigación y la innovación.

P.- Presentaste tu primera patente antes de defender tu tesis doctoral ¿Por qué te decidiste a proteger tu investigación como invención?

R.- Mi tesis tuvo un amplio desarrollo experimental en los laboratorios de materiales de mi Escuela y de la ETSAM, por lo que de ella surgieron muchos nuevos materiales en base yeso. De todos ellos, escogí uno y una aplicación y lo desarrollé de forma más pormenorizada por lo que decidí que sería bueno patentarlo. Me costó bastante pues en aquella época, en mi Escuela, no había nadie que hubiera acometido este tipo de cosas. A partir de ese momento, cada vez que a través de alguna investigación genera resultados que pueden aplicarse al sector de la construcción trato de patentarlos. Creo que es una manera diferente de dar visibilidad a lo que hacemos en la Universidad para mejorar la sociedad, acercamos la investigación a las empresas dando respuesta a alguna de sus necesidades.

P.- ¿Piensas que la sostenibilidad es un valor diferencial a la hora de comercializar los materiales patentados de los que eres coinventora?

R.- Sin duda, pero creo que con sólo eso no es suficiente. La tendencia es diseñar materiales que no sean sólo más sostenibles, si no que deben mejorar los materiales convencionales, los que se comercializan en la actualidad. Por ejemplo, estamos trabajando en materiales que además mejoran la salud de los usuarios de los edificios, consiguiendo mejorar la calidad del aire.

P.- ¿Se están utilizando los materiales de tus invenciones en la construcción “real”? ¿A qué crees que se debe?

R.- La verdad es que de forma indirecta sí, es decir, las empresas de materiales de construcción buscan ideas y las aplican en la fabricación de sus productos. Sin embargo y pese a que algunas de las patentes que tenemos ha tenido muestras de interés, al final, yo no sé si es por falta de confianza o por otras causas las empresas son reacias a comprar las patentes y prefieren financiar proyectos más específicos y patentar los resultados ellas mismas.

P.- Eres la responsable de un grupo de investigación al que pertenecen varias investigadoras que trabajan en la línea de materiales reciclados y sostenibilidad en la construcción. ¿Crees que se te puede señalar como referente de estas investigadoras? ¿Piensas que son importantes los referentes a la hora de acercar a las niñas a la ciencia y la tecnología? ¿En tu opinión, y desde tu experiencia, de qué modo podemos incentivarlo?

R.- Yo pienso que más que un referente lo que he sido es una persona que les he motivado a ver el mundo de otra manera, con una mirada diferente, buscando cómo pueden mejorarlo a través de la aplicación de sus conocimientos y la generación de ideas con una metodología científica. Y sí, creo que es imprescindible tener referentes para ilusionar y motivar carreras científicas y tecnológicas entre las chicas.

Y cómo se puede incentivar esto, pues pienso que a través de las mentorías, del acompañamiento temprano de sus profesores y de personas que trasladen mensajes ilusionantes, que vivan sus carreras como algo que ha ayudado a otros a vivir mejor, por ejemplo....

P.- A lo largo de tu carrera has tenido una participación muy activa en AMIT, un foro de discusión y una red de apoyo para todas las investigadoras y universitarias concienciadas en trabajar juntas para lograr la plena participación de las mujeres en la investigación, la ciencia y la tecnología. ¿Consideras que se está avanzando en nuestro país para lograr esa plena participación? ¿Crees que llegaremos a la igualdad en este sentido?

R.- Yo soy optimista y creo que sí, sin embargo también creo que se debe seguir apoyando a las asociaciones y a los movimientos que trabajan para conseguirlo. El mensaje debe ser claro y contundente, las mujeres deben acercarse a todas las áreas del conocimiento pues la mirada de la mujer es diferente a la del hombre y también lo que nos afecta. Por lo que ambos saberes se deben complementar y si no es así entonces nos estamos dejando la mitad de la ciencia sin desarrollar. En AMIT siempre decimos que hay que continuar avanzando, que sólo se puede dar un paso atrás para tomar más impulso pues está demostrado que el retroceso es posible.